Hola compires!!
Me paso por aquí para contaros mi experiencia. Un abrazo!!!
Expediente:
Nº Aciertos: 200
Nº Errores: 25
Nº en Blanco: 0
Puntuación Total: 89,3069
Baremo: 2,4857
Posición: 115
Nº de convocatorias: 2.
La primera para ver el examen y coger experiencia (utilicé el pesimismo defensivo para quitarme presión, y creo que fue un gran error
) y la segunda, en la que me lo tomé realmente en serio, y me presenté con posibilidades de tener plaza.
¿Cuánto tiempo os habéis estado preparando el PIR? ¿Cuántas horas habéis estudiado más o menos?
Acabé el grado en Junio de 2014. Y entonces empezó mi periodo de indecisión post-carrera. Y ahora qué hago con mi vida, pensaba. Lo único que tenía claro es que me encantaba la clínica. Estuve pensando seriamente en la opción del PIR durante el último año de carrera, pero desde la facultad nos insistían mucho en que para poder tener opciones de trabajo era muy recomendable (por no decir obligatorio) que hiciésemos el máster de psicología general sanitaria, además de que nos vendían muy bien el pgs. Nos remarcaban mucho la dificultad del examen PIR, y que sólo unos pocos de nosotros lo conseguiríamos, e incluso empezaba a escucharse que dentro de unos años implantarían el máster pgs como condición necesaria para poder acceder al PIR. Y si decido prepararme el PIR, no consigo plaza, y luego tengo que matricularme en el máster para poder presentarme… Y si primero hago el master, y después el PIR…
ese era el principal pensamiento que rondaba por mi cabeza en aquellos tiempos.
Así que para decidirme, dediqué el mes de Julio a investigar en qué consistía el PIR, las academias, el temario, y a leer experiencias de personas que habían conseguido plaza, el foro fue una gran ayuda, y desde aquí me gustaría dar las gracias a todas las personas que escribieron sus historias, porque fueron y siguen siendo una gran fuente de motivación para todos los que nos planteamos el PIR
. Tras “empaparme de información” fui consciente de que lo que realmente quería era realizar la residencia, por ser el mejor sistema formativo para psicólogos, porque me apasionaba la clínica y era un sueño el poder dedicarme a ello. Lo único que me separaba de ese sueño era el miedo al fracaso y al no conseguirlo, y el máster solo era una excusa más para no enfrentarme a ese miedo. Así que me decidí por el PIR, y me puse como “loca” a mirar más en profundidad las academias. Y ahora que academia elijo? Siguiente periodo de dudas jajaja
, creo que todos hemos pasado por ello. Al final, me decanté por CEDE a distancia, porque cerca de dónde vivía no habían academias presenciales y me era imposible desplazarme a otra ciudad.
PRIMERA CONVOCATORIA (PESIMISMO DEFENSIVO)
Me compré el temario de CEDE por ser más esquemático y porque pensaba que con el poco tiempo que me quedaba para el examen, no me iba a dar tiempo a leer todo el temario si utilizaba manuales. Empecé a estudiar en Agosto, 5/6 horas al día, pero me costaba seguir el planning de CEDE, y para sentirme mejor me autoengañaba pensando que sería imposible sacar plaza en tan poco tiempo, que no importaba no cumplir el planning porque iría al examen para “verlo”, y “coger experiencia”, porque mi año iba a ser el siguiente. Incluso, hacía los simulacros consultando los manuales en las materias que todavía no me había mirado. Al final, acabé estudiando sin horario planificado, y con las asignaturas que más me gustaban, de forma muy lenta y desorganizada. Cuando llegué al examen de enero, solo me había estudiado clínica de adultos, psicopatología, evolutiva, psicobiología y psicología de la salud. Resultados: Aciertos 167 Fallos 55 Blanco 3.
Número de orden 1124.
SEGUNDA CONVOCATORIA (EL PIR EN SERIO)
Después de unas semanas de autocrítica, decidí cambiar a FOCO, y prepararme mejor a base de trabajo con manuales, ya que las erratas del temario de CEDE me generaban desconfianza, y pensé que me vendría mejor tener una visión más amplia del temario, además de que disponía de dedicación completa al PIR, y podía estudiar más horas.
Me matriculé en Marzo al curso online de FOCO, y a día de hoy, pienso que es una de las mejores decisiones que pude tomar. Me ayudó a contextualizar la información, y el hecho de ver que muchas de las preguntas de los exámenes eran literales de lo que estaba leyendo y sabía de qué página las habían sacado, me motivaba bastante.
PRIMERA VUELTA (MARZO- AGOSTO)
Mi forma de estudio cambió completamente, durante la primera vuelta (Marzo a Agosto) trabajé mucho la lectura comprensiva, con el subrayado de colores (mis libros parecían arcoíris
jajaja). Seguí el planning de FOCO, estudiaba una media de 5/8 horas diarias, y no tenía un horario fijo. Dedicaba un día del fin de semana a ver las audioclases, y así repasar lo que me había estudiado esa semana y también a hacer preguntas por área (si me quedaba tiempo). Había días que empezaba a estudiar a las 9 de la mañana, otros a las 10, tampoco contaba las horas, pero intentaba que el tiempo que me ponía a estudiar fuese provechoso (evitaba las distracciones como el móvil y el ordenador con control de estímulos). También había semanas en las que me quedaba algún tema sin leer (intentaba que fuesen de los menos importantes). No os agobiéis si no podéis cumplir el planning al 100% (sobre todo en terapias). En mi experiencia, en la primera vuelta creo que es mejor comprender bien lo que te ha dado tiempo a leer, que hacer una lectura rápida y olvidarlo a los dos días, además, ya podréis dedicar futuras vueltas a memorizar, y a miraros lo que os ha faltado.
- Material utilizado: Bibliografía recomendada de FOCO
SEGUNDA VUELTA (SEPTIEMBRE-DICIEMBRE)
Comencé la segunda vuelta en Septiembre, aumentando las horas de estudio (8/9/10 horas). Me dediqué sobre todo a memorizar, y a hacer esquemas para reducirme el material de estudio. En las áreas menos importantes utilicé resúmenes de CEDE, de FOCO, o apuntes propios. No seguí la planificación de FOCO, sólo las dos primeras semanas, porque no me daba tiempo, y sólo conseguía agobiarme más. De hecho, tampoco abrí el libro de ejercicios que nos enviaron, preferí centrarme en afianzar lo estudiado en la primera vuelta y me diseñé una planificación propia adaptada a mi ritmo de estudio, ya que al hacer esquemas, y re-subrayar con distintos colores tardaba más tiempo. El tiempo dedicado a cada área fue proporcional al peso en preguntas de cada materia en el examen y a la dificultad que tenía para mí. Por ejemplo, a terapias y a clínica les dediqué más de 1 mes, y a básica, evolutiva o estadística sólo 4 días. Siempre que terminaba de estudiar una materia hacía todas las preguntas de convocatorias anteriores (desde el año 2000). También me hice más de 200 post -it con datos sobre prevalencias, clasificaciones, componentes de tratamientos, test, en definitiva, cosas que me costaba memorizar, y las iba repasando cuando me sentía agotada, y sin ganas de estudiar. También me llené las paredes de la habitación con folios de colores sobre el área de psicopatología (atención, percepción, conciencia, afectividad). Cuando se acercaba la fecha del examen fui ampliando los folios de colores a otras asignaturas como tratamientos, y algunos días de la semana hacía una lectura visual de ellos antes de dormir. Tengo que decir que para algunas personas les resultaba “agobiante” verse todas las paredes llenas de esquemas con información del PIR, pero a mí me servía para concentrarme y saber que cuando estaba en mi habitación, solo era para estudiar o para dormir, y si necesitaba desconectar me iba a otra parte de la casa o a dar una vuelta, etc. Convertí mi habitación en “el Bunker del PIR”
- Material utilizado:
Clínica y psicopatología: Belloch, DSM, CIE, y diapositivas foco.
Terapias: Resúmenes de FOCO completados con cosas del Vallejo.
Psicobiología: Manual de CEDE y diapositivas FOCO (parte de Psicofarmacología).
Social, Evolutiva, Estadística, Básica: Resúmenes de CEDE y FOCO (todo muy esquemático).
Personalidad, Diferencial y Evaluación: Bibliografía recomendada de FOCO (Sánchez-Elvira, Bermúdez, Moreno, Ballesteros).
TERCERA VUELTA/ REPASO INTENSIVO (ENERO).
Comencé el mes de Enero aumentando las horas de estudio (11-12 horas). Apenas quedaba un mes para el examen, y tenía que ir a por todas. La presión de tener el examen cerquita me produjo una activación “sobrehumana” jajaja
. No me hacían falta cafés, me despertaba sola en el horario previsto para estudiar, y por la noche no me entraba sueño hasta que no terminaba de estudiarme los temas de ese día. Estudiaba mañana, tarde, y noche, con descanso de 40 minutos para comer y cenar, y 15 minutos para la merienda. También hacía pequeños descansos de 5 minutos si los necesitaba. Me encontraba en un estado de “flow” total, se me pasaba el tiempo volando. La última semana, la dediqué a dar una vuelta hiper rápida a todas las materias y dediqué los dos días antes del examen a repasar tratamientos (componentes y tablas), eso hizo que llegase al examen con más confianza, y con la información más accesible.
Este último mes enfaticé la visualización como estrategia de fortaleza mental. Cuando me venía a la mente el pensamiento de “no voy a sacar plaza”, me imaginaba a mí misma, con todo detalle, cómo sería el día en el que descubriese que tenía plaza. También veía vídeos de motivación en YouTube, y leía información de residentes sobre las plazas.
EL DÍA DEL EXAMEN.
Viajé a la localidad dónde me iba a examinar un día antes del examen, y dediqué ese día a hacer cosas relajantes, baño de espuma, conversaciones con amigos y familia, algo de tele. Llegué al examen descansada y bastante tranquila, dispuesta a aguantar las 5 horas sin salir del aula (pensaba que iría justa de tiempo). Me esperé 5 minutos antes de comenzar el examen para calmar un poco ese “ansia” de empezar cuanto antes a contestar preguntas. Hice un descanso de 5 minutos a mitad del examen, y le di un montón de vueltas, hasta que decidí entregarlo una hora antes de que terminase el tiempo. Durante el examen, había momentos en los que pensaba que iba a sacar plaza, y otros en los que no, y me daba el bajón. Pienso que es bueno aprender a tolerar esos momentos de frustración cuando dudas en contestar preguntas, y tener autocontrol, pues en mi caso, tuve un momento en el que dudaba en 5 o 6 preguntas seguidas y al pensar que no iba a conseguir la plaza, empecé a arriesgar en preguntas que sabía que estaba fallando.
Otros aspectos importantes:
-
Descansos y vacaciones: Intentar ser flexibles, los descansos son FUNDAMENTALES para tomar fuerzas y desconectar, ya que el PIR es un camino largo. En mi caso, descansaba un día a la semana (sábado o domingo, según los acontecimientos que me surgían). También utilizaba descansos “extra” como refuerzo positivo cuando cumplía con lo planificado. En la segunda vuelta también respetaba los domingos y algunos días como en fechas señaladas estudiaba menos horas. En Enero sólo descansaba algunas noches, cuando sentía que lo necesitaba, y en dos cumpleaños a los que no podía faltar. Sobre vacaciones, durante la última semana de agosto no abrí ningún libro y la semana anterior solo estudié a media jornada.
- Simulacros y exámenes de convocatorias: Hacer todos los posibles, sirven mucho para ver qué áreas son tus puntos fuertes, y las que tienes que mejorar, además de que te ayudan a preparar “el día del examen”. Cuanto más os expongáis mejor.
Sobre la receta del éxito...
yo diría que no existe una única receta. Existen muchos factores que influyen y pueden ayudarte a conseguir una plaza (toda la razón a Kelley con sus "causas necesarias múltiples"
). Algunos de los que a mí me ayudaron fueron:
-
Encontrar un método de estudio eficaz: Adaptar el temario a tu forma de estudiar.
-
Esfuerzo y persistencia: No rendirte, y tener en mente cuál es tu objetivo, el por qué decidiste empezar a prepararte el PIR, ser autocrítico y aceptar que siempre hay cosas que vas a poder mejorar, premiar el esfuerzo y el estudiar día a día.
-
Autoconfianza: Creerte capaz de conseguir una plaza, confiar en tu método de estudio y aceptar que quizás puede que te lleve más tiempo del que esperas, pero que lo vas a conseguir.
-
Apoyo social y sacrificio: Fundamental apoyarte en tu familia, pareja, amigos. Ellos van a vivir esta experiencia contigo, y aunque a veces les cueste entender por qué un día estamos enfadados porque nos ha salido mal un simulacro, o por qué nos volvemos a casa temprano, o decidimos no salir una nochevieja, van a estar ahí apoyándote, y animándote para que no te rindas y lo sigas intentando. Por eso, hay que cuidar a las personas importantes y tener detalles con ellos aunque nuestra vida social sea “nula”, ya sea mediante una llamada, o un WhatsApp en un descanso, los detalles marcan la diferencia.
-
Suerte y arriesgar con cabeza: En el PIR es muy importante la suerte, y hay que aceptar que no todo va a depender de nosotros, y tolerar esa incertidumbre. Son 235 preguntas de examen, y hay que arriesgar, pero con cabeza jajaja. Yo tuve un par de preguntas que las eché a suertes y sabía que las iba a fallar, y creo que nunca me voy a olvidar de ellas
Bueno, podría seguir escribiendo muchos factores más, pero creo que ya me he pasado con tanto “tocho” jajaja.
Mucho ánimo y fuerza a todos los que persisten y luchan por su sueño!!!!
Y mucha suerte en la asignación de plazas para los que lo hemos conseguido!!!
Y termino con una frase que a mí me marcó mucho durante esta experiencia
“No basta solo con querer, hay que estar convencido de que se puede”.