1. Tiene lugar en varones genéticos por la incapacidad de producir hormona antimülleriana o por la ausencia de receptores para ésta.
2. Tiene lugar en varones genéticos en los que se produce la masculinización pero no la desfeminización.
3. Ocurre en hembras genéticas que presentan, a partir del tercer mes de gestación, un exceso de producción de andrógenos en las glándulas suprarrenales.
4. Las gónadas se diferencian en testículos pero los órganos sexuales externos adoptan forman femenina.
El Síndrome de Morris es también conocido como síndrome de insensibilidad a los andrógenos. Se produce en sujetos XY, es decir, varones genéticos (opción 3 incorrecta) y por lo tanto las gónadas se diferenciarán en testículos. Como su nombre indica, se produce por una falta de sensibilidad a los andrógenos, por lo tanto no se producirá el efecto masculinizante de los órganos sexuales internos (opción 2 incorrecta). En cambio, la hormona antimülleriana sí actúa con normalidad produciendo su efecto desfeminizante (opción 1 incorrecta) y haciendo que los órganos internos tampoco se diferencien en femeninos. Respecto los genitales externos, ya sabemos que en ausencia de testosterona (o si esta no puede actuar, como ocurre en este caso) se desarrollan automáticamente en femeninos. Por lo tanto tendremos una persona que genéticamente es varón pero que externamente tendrá órganos sexuales de mujer. No obstante, no será fértil al no poseer órganos sexuales internos.
Qué células sensibles a la luz envían sus señales al núcleo supraquiasmático
1. Células orexinergicas del hipotálamo lateral
2. Células magnocelulares del núcleo geniculado lateral
3. Células ganglionares fotosensibles de la retina
4. Conos y los bastones de la retina